Radiografía Informativa.- Esta mañana, Delfina Gómez Álvarez, alcaldesa de Texcoco, en compañía del diputado local, Higinio Martínez, ofrecieron una conferencia de prensa donde manifestaron oponerse al proyecto de construcción del nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México sin que antes se informe de los beneficios y riesgos que implica esta magna obra.
Martínez Miranda señaló el riesgo latente de que alrededor del aeropuerto se instalen asentamientos irregulares, que solamente generarían un cinturón de pobreza y a la larga exigirían servicios y obras, tal como las colonias marginadas que rodean al actual aeropuerto.
Por su parte, delfina Gómez aseveró que hasta el momento no tiene información por parte del gobierno federal de los planes de construcción del nuevo aeropuerto dentro del municipio de Texcoco, además afirmó que solicitó una entrevista con el presidente Enrique Peña Nieto para conocer de fondo el proyecto, que afectará al municipio que gobierna.
Asimismo, aseveró que Texcoco no dará permisos ni licencias de construcción sin antes conocer a fondo el proyecto: “El ayuntamiento de Texcoco no dará permisos ni licencias de construcción para la edificación de la terminal aérea en la zona, debido a que no conoce a fondo el proyecto”, dijo.
“Nosotros como ayuntamiento tenemos la facultad, con base al artículo 115 en la fracción V, de expedir licencias y ver la cuestión de uso de suelo, aun cuando sean terrenos federales. Por eso, si no conocemos un proyecto, obviamente tendremos nuestras reservas para entregar los permisos. No daremos permisos, si ponemos en riesgo alguna situación de desarrollo urbano”, abundó.
Al respecto, el legislador local puntualizó: “A nosotros no nos importa si va tener 20 pistas, si está hecho por un arquitecto inglés o si será el mejor aeropuerto del mundo, éste es un negocio que beneficiará a unos cuantos, a nosotros nos preocupa que va pasar con Texcoco, los asentamientos, las industrias y las zonas históricas”.
En la conferencia, se tocó además el punto del mal estado de la carretera Peñón-Texcoco, en donde los accidentes son constantes debido a su mal estado, falta de mantenimiento y descuido por parte de los concesionarios, además del alto costo que tienen que pagar miles de automovilistas diariamente.